Selección de viñedos viejos de las zonas más frescas de la Ribera del Duero burgalesa, una zona en expansión y cada vez más reclamada por el potencial de sus uvas. Viñedos entre 50-80 años de edad, en vaso, con podas equilibradas para una carga limitada a 3.500 kilos por hectárea.
Viñedos con diferentes riquezas en suelos, principalmente en terrenos arcillosos, calcáreos y pedregosos, con superficies ricas con canto rodado. Estos suelos impregnan al vino de estructura y potencia, características que junto con las orientaciones de las parcelas logran una maduración y un perfil muy apto para la elaboración de vinos de guarda.